Se encuentra en la Plaza Pedro Miñor
Este conjunto forjado en hierro se encuentra instalado sobre un bajo y amplio pedestal de piedra.
Sobre este se disponen tres figuras: un hombre y dos perros.
El hombre se trata de un mendigo de avanzada edad que, a pesar de portar una americana roída y unos pantalones con rodilleras,
intenta dignificar su figura con una corbata y un sombrero arrugado.
El anciano apoya su mano derecha con un bastón, mientras que con la otra pide limosna.
Además, este hombre se encuentra acompañado por dos perros callejeros: Rufo y su
compañero, que fueron muy populares en la ciudad durante los años ochenta.
Rufo también goza de su propio retrato individual en las inmediaciones de la calle Uría de Oviedo.
(Orlando Pelayo, 2005)
(Manuel Reguera y José Palacio San Martín, 1789)
(Homenaje del Ateneo de Oviedo, 1967)